Técnica Pomodoro de estudio: cómo aplicar este método
En muchas ocasiones, las exigencias académicas pueden superar el tiempo necesario para responder de manera eficaz. Justamente por ello, existen distintos métodos de estudio que permiten optimizar el tiempo dedicado a ello, asegurando la máxima asimilación del conocimiento. Aquí tienes un listado con las mejores técnicas de estudios y uno de los métodos más eficaces de este tipo es la técnica Pomodoro de estudio.
Qué es la técnica Pomodoro
Esta técnica es un método de estudio focalizado en aprovechar al máximo el tiempo y el esfuerzo dedicado al estudio. Supone una gestión eficaz del tiempo ciclos continuos que cumplen una función determinada para la máxima asimilación del conocimiento. Estos se dividen en intervalos de estudio, llamados pomodoros, e intervalos de descanso.
La idea es dividir el tiempo en función de los requerimientos del material de estudio y la complejidad de su contenido. Si bien este puede adaptarse a las necesidades del estudiante y el material, en su formato más común, este supone una división en cuatro intervalos o bloques de trabajo a los cuales se les intercalan intervalos de descanso breves y uno pronunciado. Cada cuatro intervalos, se cierra un ciclo Pomodoro.
El objetivo principal del método Pomodoro es conseguir el máximo nivel concentración para optimizar la productividad, obtener mejores resultados y reducir el esfuerzo innecesario. Es por ello que, en Destu, lo proponemos como una gran alternativa para estudiantes de los que se espera un alto rendimiento y tienen enfrente una carga de trabajo rigurosa.
Ventajas de aplicar la técnica Pomodoro en tu estudio
La técnica Pomodoro, en tiempos específicos de estudio y breves intervalos de descanso, ofrece múltiples ventajas al estudiante. No solo permite aumentar la productividad y optimizar el tiempo dedicado a ello, sino que además reduce el cansancio, mejora los resultados obtenidos y también mejora la predisposición. Podemos listar las siguientes ventajas que surgen de implementar esta técnica de estudio de manera regular:
- Es posible focalizar la concentración al máximo, reduciendo las distracciones y la dispersión de la atención.
- El mismo empleo de la técnica mejora las facultades de concentración y produce estudiantes con un mejor desempeño.
- Se optimiza el tiempo de estudio y se organiza el cronograma de manera eficiente para afrontar distintas instancias de evaluación.
- Este método permite incorporar el hábito del estudio sin que ello represente una carga abrumadora para el estudiante que encuentra dificultades para ello.
- Su implementación frecuente estimula al estudiante y le permite visualizar cuánto esfuerzo será necesario para abordar el material de estudio.
- Finalmente, la técnica Pomodoro reduce el cansancio y el estrés, ofreciendo objetivos a corto plazo que permiten obtener un resultado inmediato del tiempo dedicado al estudio.
Cómo funciona el método Pomodoro
El método Pomodoro resulta relativamente sencillo de implementar: consiste de intervalos dedicados a estudiar e intervalos dedicados a descansar. Sin embargo, debe aplicarse de manera estricta para resultar efectivo; no deben obviarse intervalos ni producirse distracciones durante el estudio.
Previamente a su aplicación, el método Pomodoro requiere una organización de las tareas de estudio según su dificultad y prioridad. Una vez hecho esto, se identifica un temario y se establecen los siguientes ciclos:
- Se dedican 25 minutos por intervalo a estudiar un tema, capítulo o sección del material. Lo ideal es poder completar una sección o tema por cada intervalo de estudio.
- Por cada intervalo de estudio completado, debe tomarse un descanso de 5 minutos. Lo ideal es no dedicar este tiempo a una actividad que nos distraiga demasiado.
- Luego de cuatro intervalos con sus respectivos descansos, lo que se denomina un ciclo de pomodoro, se dispone de un periodo de descanso prolongado de entre 20 y 30 minutos.
Este es el modelo estándar del método Pomodoro. Sin embargo, una vez que el estudiante haya asimilado este método de manera satisfactoria acorde a su cronograma de estudios, es posible adaptarlo a las necesidades propias del material que se busca incorporar. A continuación, desarrollamos algunas pautas a tener en cuenta en caso de personalizar el método a nuestros parámetros.
Concentración y descanso
Para ser efectivo, el método Pomodoro requiere una concentración eficaz durante los periodos de estudio, sin importar su extensión. Del mismo modo, es necesario que los intervalos de descanso cumplan con una relación proporcional de una quinta parte del tiempo de estudio —con excepción del periodo de descanso final—.
Organización de un cronograma
De nada sirve optimizar el tiempo de estudio mediante esta técnica si debemos distraernos luego de cada ciclo Pomodoro para organizar el material. Para ser efectivo, el material y los ciclos deben organizarse antes de comenzar: pueden emplearse cuadros, diagramas y esquemas según su importancia, extensión, complejidad, etc.
Cuantificar la información y los intervalos
Como mencionamos antes, es necesario aplicar una concentración rigurosa durante cada periodo de estudio. Sin embargo, no es necesario sumar unas cuantas líneas de lectura si nos quedan uno o dos minutos sobrantes, lo importante es cerrar un tema o capítulo.
Cualquier técnica o sistema de estudio y aprendizaje tiene sus ventajas, es bueno conocer diferentes sistemas ya que unos pueden funcionar mejor que otro dependiendo de tus objetivos. En estos otros artículos puedes encontrar información sobre el método memorización mnemotécnica y cómo realizar un brainstorming.
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